El amor es el sentimiento más profundo que puede sentir un ser humano. Fluye en tu ser como un golpe eléctrico que arropa tus sentidos y transforma tu entorno. Esa sensación de paz y alegría reduce tu yo y aumenta tu prójimo a dimensiones hiperbólicas.
Nuestro Señor Jesucristo al derramar su sangre por nuestros pecados nos dió el ejemplo más perfecto de amor.
Me encuentro en prisión como consecuencia directa del amor que siento por mis nacionales, muy especialmente por mis hermanos viequenses. La decisión de incursionar en los terrenos restringidos del agresor del pueblo viequense no fue nada sencilla. Hubo un momento de introspección, de algunos segundos que para mí fueron eternos. De un lado el andamiaje casi perfecto de la formación educativa en un país colonizado, de otro la pasión edificante del deber e ideales. Fue en ese último segundo cuando mi corazón se echó a volar en un viaje que no acaba, en una paz que solo reina cuando se cumple con la conciencia.
El amor es el sentimiento más profundo que puede sentir un ser humano. Fluye en tu ser como un golpe eléctrico que arropa tus sentidos y transforma tu entorno. Esa sensación de paz y alegría reduce tu yo y aumenta tu prójimo a dimensiones hiperbólicas.
Nuestro Señor Jesucristo al derramar su sangre por nuestros pecados nos dió el ejemplo más perfecto de amor.
Me encuentro en prisión como consecuencia directa del amor que siento por mis nacionales, muy especialmente por mis hermanos viequenses. La decisión de incursionar en los terrenos restringidos del agresor del pueblo viequense no fue nada sencilla. Hubo un momento de introspección, de algunos segundos que para mí fueron eternos. De un lado el andamiaje casi perfecto de la formación educativa en un país colonizado, de otro la pasión edificante del deber e ideales. Fue en ese último segundo cuando mi corazón se echó a volar en un viaje que no acaba, en una paz que solo reina cuando se cumple con la conciencia.
Y así entré junto a un grupo de compañeros del Partido Independentista Puertorriqueño, la misión; alterar los propósitos maquiavélicos de un aparato militar abusador y prepotente mediante desobediencia civil pacífica. La marina de los Estados Unidos de Norteamérica (NAVY) es una organización guerrista en donde la vida es un factor más dentro de su tablero de juego. En donde los habitantes de Vieques son unas piezas más prescindibles que una de Ohio u Oregón (éstas pagan impuestos y pertenecen a la misma etnia).
Pero fuimos allí guiados por el deber que representa el defender la voluntad mayoritaria de nuestra nación. El pueblo puertorriqueño tomó una decisión en cuanto al conflicto de Vieques hace ya mucho tiempo y el Comandante en Jefe de esa organización guerrista ignoró el reclamo de Puerto Rico por una razón sencilla; los mejores intereses de la nación que el preside (USA) antagonizan con los mejores intereses nuestros. No hay forma de reconciliar ambas posturas sin que se afecte significativamente la otra, por eso la marina (NAVY) sigue construyendo edificaciones permanentes en el área que controla, por eso siguen otorgando contratos de 5 y 10 años de duración y por eso es que el Senador Trent Lott propone la compra de la isla municipio de Vieques.
El poder político necesario para defender la integridad de una nación emana de la soberanía sobre su territorio. En las colonias la única forma de hacer valer ese derecho es mediante la confrontación del poder de la metrópoli y la voluntad de los nacionales del territorio.
Esa madrugada del 27 de junio del 2000 se enfrentaron el poder del gobierno de los Estados Unidos de Norteamérica y la voluntad de nuestro pueblo por defender el derecho inalienable a la vida en Paz de nuestros nacionales. Fue en esa operación iniciada desde la cima del monte Carmelo en Vieques que penetramos la verja que injustamente separa a nuestros hermanos viequenses del territorio arrebatado y controlado con trucos y pseudo-leyes colonialistas. Fue en el Monte Carmelo donde el pueblo de Israel escuchó el reto de tomar una decisión a la pregunta de el último profeta de Jehová en su época, Elías – “¿ Hasta cuando van a continuar ustedes con este doble juego? Sí el Señor es el verdadero Dios, síganlo a él, y si Baal lo es, a él deberán seguirlo”. 1ra Reyes 18:21
Hermano boricua, yo te invito a superar la verja del colonialismo, a exigir lo que por derecho natural nos corresponde; la soberanía nacional sobre nuestro territorio y el respeto global a nuestra voluntad y dignidad.
Sólo así podremos amar libremente en una patria justa.
Angel Berríos Dávila
Metropolitan Detention Center, Guaynabo PR
5 de julio de 2000