A treinta y siete años de Maravilla
A treinta y siete años de Maravilla
Entonces la mente no da para lamentar accidentes del camino, el largo tiempo del trayecto o las curvas infinitas de la ruta
Por Hugo Rodríguez Díaz
Publicado en El Vocero
29 de julio 2015
Por un error del GPS del teléfono celular no llegué a tiempo para el acto político que se llevó a cabo el pasado sábado en Villalba. La aplicación emitía una voz femenina, algo metálica y con acento de España, cuyas instrucciones me extraviaron por más de una hora. Cuando terminé en una estrecha carretera que moría en el portón de una finca privada, recurrí al método antiguo pero infalible de bajar el cristal del auto y preguntar direcciones.